la investigación II
valerie bailly ha resultado ser la cotorra más insoportable de toda parís. una gilipollas con mayúsculas que, en una ciudad en la que densidad de gilipollez es altísima, brilla con luz propia.
de las puertas del colegio los niños salen disparados, como empujados por una fuerza mayor. mola verlos correr como posesos, te acuerdas de lo que significaba ese momento. una niña morena sale detrás de ellos sin correr y con pinta de 'lo mismo me da quedarme dentro que salir'. ahora que soy detective me fijo en esas cosas y, ahora que conozco a la madre, comprendo porque a clarise tonnelier se la pela salir o no salir del colegio. valerie lleva un rato mirándome (soy la única persona que no lleva un enano colgado del brazo) y, una vez enganchada a su niña, se me acerca a toda hostia. tengo un poco de miedo, las madres son criaturas muy violentas cuando sus cachorros andan cerca. la verdad es que la tía me ha cargado desde el principio.
hemos ido a un café a que ella me hable. apenas he dicho nada. le dije que era una prima lejana de denise y que lo único que recordaba de ella era el nombre del colegio. tenía datos pensados para darle en caso de que ella viera algo raro pero le daba igual. valerie tiene un día bueno, quizá se ha puesto de prozac hasta las trancas para luego poder llamarnos yonkis a los demás sin echarse a llorar, y viene dispuesta a abrirme su corazón.
saco en claro que denise fue vista hace aproximadamente 10 días. según valerie, estaba nerviosa y no tenía muchas ganas de hablar pero consiguió sonreir después de que su antigua compañera le refrescara la memoria infantil (no me creo esto último). denise no le dijo a valerie nada de su vida pero valerie cree que no estaba bien. a juicio de valerie, denise va desarreglada, es improbable que terminara el instituto, no tiene pareja, su vida es una mierda, es artista o algo peor, fuma porros, es atea y no tiene, ni busca un futuro. llevo un traje de chaqueta que vale un pastón y valerie se siente segura conmigo. a mí, denise marin cada vez me cae mejor.
ahora sé que denise debe tener 28 años, es alta, castaña, tiene los ojos negros y una paleta rota. la zorra anoréxica de valerie me dice que no es muy guapa pero vete tú a saber a que se refiere.
he estado en la rue de trévise de vuelta a casa de jerome. he visto el restaurante chino y he entrado. le he preguntado a la camarera si conoce a denise. ella sólo me ha dicho: chica extraña, vende, vende.
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