martes, julio 03, 2007

marco testa ha dejado una nota en la mesa del salón: "lo siento. me voy al norte". no dice: "huyamos al norte", no dice: "lo siento, rubia mía, me voy al norte. te pensaré", no dice: "he bajado a comprar el desayuno". dice en letras muy claras: "lo siento. me voy al norte". nada más.
pienso: en el norte hará frío.
vertigine (roma, 28 abril 2007)
me pongo a hacer otra cosa como el que no sabe leer, me pongo a pensar en que hablé con mi padre la semana pasada, me río recordando la conversación, como el que no lee, ya digo.
voy a lavarme la cara al baño, cuando empiezo notar los cristales bajar por mi garganta, uno a uno. se me rompen el corazón y el orgullo, y me quedo sentada en el suelo contando las letras que caben en las seis palabras que leí, para saber cuantos jodidos cristales me quedan por tragar.
me hacía feliz marco testa. ahora se ha ido al norte. pienso: es aquí donde hace frío.